La Dirección General de la Guardia Civil va a poner en marcha en breve un programa piloto para intentar que el cuerpo no se quedé bajo mínimos de efectivos en verano. La intención es que los agentes repartan las vacaciones a lo largo del año a cambio de un incentivo económico que roza los 1.200 euros, en concreto, 1.188.
Los datos que se conocen de momento señalan que aquellos que renuncien a disfrutar de sus vacaciones en el periodo estival, en concreto entre el 15 de junio y el 15 de septiembre, y sean seleccionados conforme a unas directrices que todavía no se han hecho públicas recibirán una compensación económica bruta.
El Mando de Operaciones del Instituto Armado ha informado a los representantes de las asociaciones profesionales de este anuncio que no figuraba en el orden del día del Consejo de Personal del cuerpo. Será este organismo el encargado de designar las comandancias, ubicadas en zonas costeras y en áreas interiores, donde sea necesario que los efectivos se mantengan. Después, los jefes de estas precisarán las unidades en las que se aplicará.
Plazos de vacaciones
Antes del 28 de abril, los agentes de la Guardia Civil deben notificar sus fechas de vacaciones. Desde el 29 y hasta el 6 de mayo, sus superiores las autorizarán o no. ¿Cuándo se aplicaría esta nueva medida? Este programa piloto arrancará a partir del 7 de mayo cuando, tras la autorización, el personal destinado en unidades para las que se disponga la renuncia incentivada, deben formular su solicitud. Esta se confirmará entre el 15 y el 21 de junio.
