El Servicio Marítimo de la Guardia Civil como tal nació el 22 de febrero de 1991. Fue entonces cuando un Real Decreto certificó una función que llevaba desempeñando muchos años. El SEMAR ejerce una misión específica al ser la policía marítima o la “Guardia Civil del Mar”.
Su creación oficial se debió a la creciente actividad que se desarrollaba dentro del mar territorial. Esa necesidad urgente fue a parar a más de la Benemérita sin perjuicio de las competencias que los Departamentos ministeriales tenían atribuidas.
Veinte años después, la especialidad marítima y la estructura, organización y funciones del Servicio Marítimo, establece que el SEMAR tiene como misión específica constituirse en la policía marítima en tres ámbitos: Prevención, administración y Justicia. Además, asume las funciones genéricas que le corresponden a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en las aguas marítimas españolas y en las aguas continentales, incluidas las actividades subacuáticas.
Por otro lado, en sus manos está planificar y coordinar las competencias específicas de la Guardia Civil en este ámbito y, en particular, la vigilancia marítima, la lucha contra el contrabando y el control de la inmigración irregular.
El Servicio Marítimo colabora con otros organismos españoles con competencias en la mar, como la Armada, Salvamento Marítimo, Marina Mercante, Aduanas, Medio Ambiente o Pesca. Además, en el extranjero participa en aquellas misiones internacionales de cooperación policial, para mantener la paz o por razones humanitarias.
El despliegue territorial del Servicio Marítimo cubre toda la costa española y está articulado en Grupos Marítimos y Servicios Marítimos Provinciales. Actualmente, el SEMAR cuenta con más de 1.300 efectivos, tres buques oceánicos, 18 buques de altura, 44 patrulleras medias, cuatro ligeras y 69 embarcaciones de apoyo.